sábado, 23 de mayo de 2009

LOS PARQUES PARA PERROS


De un tiempo a esta parte, se observa que cada vez más alcaldes en Lima estan construyendo en los parques de su distrito juegos recreativos para los niños. Vale decir espacios donde los niños puedan divertirse seguros acompañados de sus padres. Esta es una actividad que une a las familias, y que lleva a los padres a pasar más tiempo con sus hijos en espacios abiertos. Tradicionalmente los parques en Lima han sido mucho pasto, muchas flores pero nada más, en realidad servían para sacar a pasear al can, por ello los denominaba "parques para perros". Supongo que de tanto viaje al mundo desarrollado muchos alcaldes están comprendiendo la importancia que este espacio tiene para la familia o talvés haya sido el empuje del boom inmobiliario que estamos viviendo, no importa la razón, pero se esta haciendo, lento pero igual ya se ven más.
Normalmente, estos juegos solo los encontrabas en los restaurantes de comida rápida o en clubes privados, lo cual implicaba que el que no tenía para una comida o no estaba afiliado a un club tenía que contentarse con llevar a sus hijos a estos parques donde los niños se aburrían rapidamente, es lo que llamo una "sociedad de consumo", pero ahora se ven cada vez más de estos parques con juegos.
El problema según algunos alcaldes es que los vecinos se niegan a poner estos juegos en el parque cercano a su casa porque podrían ser invadidos por gente de otros lugares, vamos ¿a ese punto a llegado el egoismo en los peruanos?. Una vez, cuando estudiaba en Madrid, donde casi todos los parques -hasta los más pequeños- tienen estos juegos, realicé una visita a la alcaldía de una cercanía y le pregunté al alcalde si esa oposición de los vecinos también la encontraban por allá. El alcalde muy risueño me contestó: "al inicio también teniamos ese problema, pero nosotros estamos para ver el bienestar de todos y principalmente de cuidar la cédula básica de la sociedad que es la familia, así que igual los colocábamos. Poco a poco fueron los vecinos dándose cuenta de la importancia de ello para nuestra sociedad, y ya no hay muchos que se quejen por ello". Pues esa respuesta me quedó grabada para siempre. No se trata de hacer lo que los vecinos quieren solamente, en principio ellos nos son dueños de los parques, sino de hacer lo que está bien socialmente.
Bien por los alcaldes de esos distritos limeños, ¡los felicito!. A seguir con esta política en todo el país, darles mantenimiento y los que aún no lo han llevado a cabo, a pegarse a la fila ¡vamos!.

lunes, 18 de mayo de 2009

LA VUELTA DEL HIJO PRÓDIGO : LAS FINANZAS

Como todo buen economista sabe, la microeconomía es la columna vertebral de la ciencia económica, de la cual parten en su esencia las demás ramas del conocimiento como la macroeconomía y las finanzas, basta abrir sino cualquier libro de economía de la rama que sea para ver que siempre hace uso del instrumental fundamental de la microeconomía. Sin embargo, en los últimos tiempos, el hijo pródigo, las finanzas, adquirió mayoría de edad y se fue de la casa, vale decir se apartó de los fundamentos esenciales de la economía. 

¿Cómo así?, pues la microeconomía basa todos su análisis en las preferencias de los individuos, el ingreso, los precios de bienes y factores, el poder de mercado y la incertidumbre. Esta última ha sido un tema muy estudiado en el campo de las finanzas, donde se ha dado su mayor desarrollo, a tal punto que el loable objetivo inicial de minimizar el riego, se fue convirtiendo en un manejo "oportunista" de este, transformándolo en un juego de casino (de allí el apelativo de que vivimos en una "economía casino"). Es claro que el mundo de las finanzas se ha apartado del mundo real de la microeconomía, y ello tenía que estallar en algún momento. 

Muchos creen que la gran crisis se la debemos a un grupo de banquero avariciosos, nada mas incompleto, la gran crisis mundial que vivimos hoy, es el resultado de la informalidad en que se dejó estar a las finanzas, y a la forma de actuar propia de "los seres humanos", no solo de los banqueros. Póngase a pensar, si usted trabajara en un banco de inversión y debe colocar papeles financieros respaldados en transacciones que a su vez están respaldadas en otras transacciones y que a su vez están respaldadas en otras transacciones que no conoce, y piensa que ello no es algo bueno y se lo fuera a decir a su jefe, seguro que al día siguiente estaría en la calle, en cambio si no lo hace, obtendría un bono formidable a fin de año que le permitirá comprarse una casa hermosa. ¿Qué decidiría?. Si, ya se que muchos dirán ¡vaya pero yo no haría eso!. 

Pues ya lo quiero ver, la ciencia económica hace rato descubrió que siempre habrá alguien dispuesto a hacerlo y eso es lo que cuenta, lo que basta para generar un equilibrio dinámico no deseado socialmente. Sino entonces porqué en los países desarrollados sobre todo, los jóvenes que egresan de las universidades desean con toda su alma trabajar en el mundo de las finanzas (bueno deseaban). 

Acaso no intuyen lo que van a tener que hacer? Claro que sí, pero es preferible actuar con racionalidad limitada y no hacer juicios de valor sobre ello, son los tiempos modernos. Así somos los seres humanos señores, por ello debe volverse a los fundamentos microeconómicos de las transacciones reales. Como bien señala Hernando De Soto, en un artículo muy interesante de hoy en América Economía en línea (*), la forma de volver a ello es la propiedad, definir claramente que respalda que y controlar el movimiento y volumen de esos documentos derivados y yo diría, incluso limitarlos a ciertos márgenes. Por ello, la crisis no es financiera, es de la creencia ingenua -o malintencionada- del accionar correcto del ser humano, en un juego donde la estrategia dominante es no serlo, al menos cuando no se define una autoridad que modifique los incentivos hacia un equilibrio paretiano.

martes, 12 de mayo de 2009

¡QUE INTERÉS EN EL AZUCAR!

¡Válgame Dios! esta sí que ha sido una semana llena de cosas impresionantes en este país de las maravillas. 

El que más llamó mi atención fue el de la intención de algún congresista del partido de gobierno, muy interesado en que se limite las fusiones para la explotación azucarera. 

La genial idea, pasó inicialmente porque se limite la compra de otra empresas a aquellos que ya tienen una buena parte del mercado (lo cual afecta con nombre propio al grupo de los Rodríguez Banda), so pretexto de que ello generaría una concentración en dicha industria y debemos defender a los consumidores y los agricultores (monopsonio). 

Primero que nada, la industria azucarera ya se encuentra concentrada desde más o menos el año 2004 (ver Caretas Edición N° 1890 - Popy, Escudero de Barones del Azúcar), segundo que el control previo de fusiones no se aplica en nuestro país y se guía mas bien por la regla de la razón, control ex-post que está en manos del INDECOPI, tercero que en la experiencia de los últimos años, más bien se ha visto un beneficio para los agricultores de caña que hasta sujetos de crédito se han convertido para las entidades financieras. 

Particularmente, me suena a que existe un interés más allá de lo evidente, como decía alguien, entre grupos empresariales. Lo peor de todo es que en su afán de cerrarse el camino, uno de los grupos ha propuesto prácticamente el latifundio, determinando el máximo de tierras que se puede manejar, inaudito realmente. Una prueba más para aquellos que señalan que en el Perú, la política, no es otra cosa que un instrumento del poder económico. 

Si alguien quiere convertirse en adalid de la competencia en el Perú, debería promover el equipar mejor al INDECOPI y promover leyes que corrijan la concentración en los más de 20 sectores donde ya existe de aquí al futuro, hacerlo solo para uno de ellos, tan oportunamente y viniendo de autoridades públicas, se denomina... no me acuerdo como es el término..., quizá algún abogado me pueda ayudar.